Hoy queremos hablaros acerca de la importancia de mantener siempre los paneles solares fotovoltaicos lo más limpios posible.

Es una cuestión que siempre nos han preguntado nuestros clientes y que genera algunas dudas.

Bien es cierto que el agua de la lluvia y el aire pueden contribuir y ayudar a mantener limpios los paneles solares, pero hay ocasiones en las que conviene realizar una limpieza más profunda para eliminar cualquier resto que nos pueda estar ocasionando opacidades, por aquello de que cuanta más radiación solar podamos captar, más energía se podrá producir.

Un panel solar con suciedad, polvo, excrementos de aves, etc. reduce su rendimiento entre un 8% y un 15% aproximadamente, lo que conlleva unas pérdidas considerables a lo largo de un año si lo multiplicamos por el número de paneles solares instalados y tenemos en cuenta la cantidad de kwh que han dejado de producir. Y si hablamos de meses donde la radiación solar es menor, estas pérdidas pueden ser muy notables.

¿CÓMO PODEMOS LIMPIAR LOS PANELES SOLARES DE NUESTRA INSTALACIÓN?

La manera más sencilla y eficaz para hacerlo es utilizar un cubo con agua limpia, jabón casero y una esponja. Una vez limpios con el jabón, aclarar nuevamente con agua limpia y posteriormente secados con una gamuza de algodón.

Es importante tener en cuenta elegir un buen horario para realizar estas labores de limpieza. Las mejores horas para ello son por la mañana cuando el sol no aprieta demasiado, o por la tarde a última hora. Aunque pueda parecer obvio, es importante recordarlo, ya que la superficie de un panel solar puede alcanzar muy altas temperaturas.

Como nota importante, destacar que antes de empezar estos trabajos de limpieza debemos guardar unas medidas de seguridad mínimas para no correr ningún riesgo de caídas, cortes, deslizamientos, quemaduras, etc.